Hayedo de Montejo de la Sierra

El Chaparral y La Solana. Montejo de la Sierra. Madrid

Localización

Historia, leyenda y curiosidades

Formado en realidad por los montes de El Chaparral y La Solana, el hoy conocido como Hayedo de Montejo pertenece a los vecinos de Montejo de la Sierra desde 1460, fecha en que se compró a un caballero de Sepúlveda según se indica en el pleito que, en el siglo XVI, sostuvieron por el uso de sus pastos ante el rey Carlos I frente a la Villa y Tierra de Buitrago, documento que aún se conserva. También se cita en las Ordenanzas de Buitrago del Lozoya de 1568 (como acebeda) y en el catastro de Ensenada (1750-1756), especificándose ya en este último que “el monte no se cortaba por lo escarpado del terreno y ser principalmente de hayas y acebos”.
A pesar de exceptuarse de las sucesivas desamortizaciones del siglo XIX, sí tuvo aprovechamientos posteriores de leña y madera que, sin embargo, no impidieron que se mantuvieran un elevadísimo número de pies varias veces centenarios. La gestión llevada a cabo por las administraciones estatal, municipal y autonómica lo ha convertido en un bosque maduro, con una estructura y proporción de madera muerta que, sin comprometer su futuro por razones fitosanitarias, ha permitido mantener una riqueza biológica que se pone de manifiesto en todos los inventarios realizados (botánico, micológico, de mariposas, escarabajos saproxílicos o líquenes, entre otros).
Desde principios del siglo XX ha sido objeto de numerosos estudios científicos que han puesto de manifiesto su extraordinaria importancia y valor natural. El control de sus visitas y los servicios de interpretación y educación ambiental le han conferido además un valor añadido que ha llegado a convertirlo en el motor de desarrollo de la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón, esquina oriental de la sierra de Madrid (entre Guadarrama y Ayllón), a través de servicios turísticos y de ocio que han permitido el asentamiento de una población joven en núcleos de población con elevadísimo interés urbanístico, etnográfico, histórico y artístico.

Importancia del árbol y motivo de la presentación al concurso

La importancia y trascendencia natural del Hayedo de Montejo queda claramente de manifiesto considerando las figuras de protección que se le aplican: Monte de Utilidad Pública desde el primer inventario de Madrid (1862), Sitio Natural de Interés Nacional (1974), zona núcleo de la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón (2005) e integrante del bien en serie Patrimonio Natural de la Humanidad (UNESCO) de los hayedos primarios y maduros de los Cárpatos y otras regiones de Europa (2017).
También se vienen desarrollando en él desde 1992 los trabajos ligados a un Convenio firmado entre la Comunidad de Madrid y la Fundación General de la Universidad Politécnica para el desarrollo de labores de investigación por parte de la Escuela de Ingenieros de Montes. En 1989, además, se arrancó un programa de interpretación del patrimonio natural (con guías especializados) que llevó, al año siguiente, al control de la entrada de visitantes (con establecimiento de recorridos específicos y guiados) y más adelante, en 1997, al inicio de uno de los programas de educación ambiental que desde esa fecha forman la Red de Centros de la Comunidad de Madrid (del que se han cumplido ya, por tanto, veinticinco años).
Dentro de sus límites se encuentran hayas, melojos, robles albares, tejos y pinos silvestres catalogados como singulares por la Comunidad de Madrid que son solo los ejemplares más sobresalientes de los numerosos pies varias veces centenarios que pueden contemplarse al pasear por él.
Diferenciadas claramente sus partes de uso público y de reserva científica, todo ello ha convertido a este bosque en pieza clave para el desarrollo social y económico de esa comarca, partiendo de principios y claves de responsabilidad personal y ambiental reconocidos por los muchos visitantes que participan cada año en las actividades e itinerarios que en él se desarrollan.